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¿Qué es el cristal?

Es un material natural, duro y transparente que está presente en infinidad de productos cotidianos.

Permite el marcaje mediante varias técnicas y es perfecto para regalos personalizados elegantes.

Los cristales son cuerpos sólidos, creados por conjuntos de partículas, que están dispuestos según un orden regular y repetido.

En sus inicios, su nombre provenía de ‘kyros’, que significa frío (hielo formado a partir del agua). Después, cambió a ‘krystallos’ (transparencia). Los griegos llamaban así al cuarzo, creyendo que se trataba de una variedad del hielo.

Casi todos los cristales naturales se crean a partir de la cristalización de gases a presión en la pared interior de las geodas.

La calidad, el tamaño, el color y la forma de los cristales, depende de la presión y composición de los gases en dichas geodas, además de la temperatura y más condiciones del magma en el que se formen.

¿Para qué sirve el cristal?

Actualmente, el cristal está muy presente en muchos ámbitos, sobre todo en la fabricación de vajillas, envases y tarros de cocina, así como botellas de agua personalizadas y demás productos como platos o tazas de cristal.

Construcción

En la industria de la construcción tiene mucha presencia sobre todo en los acabados. Como por ejemplo en ventanas, fachadas o incluso ladrillos.

Permite almacenar sustancias, sobre todo comida y bebida, con mucha seguridad, gracias a las propiedades que posee.

Diseño de interiores

En la decoración y diseño de interiores se utiliza mucho, tanto en espejos, mamparas y mesas como sillas y armarios de cristal. 

Es resistente al calor y también al paso de líquidos y electricidad, lo que lo hacen un material muy empleado en electrodomésticos y aparatos tecnológicos.

Al tratarse de un material tan atractivo y resistente, en la industria de los regalos promocionales se utiliza de forma habitual, ya que permite crear obsequios de calidad que se pueden personalizar y ofrecernos resultados espectaculares.

¿Qué beneficios tienen las propiedades del cristal?

Detrás de casi todos los materiales sólidos que encontramos en nuestra vida diaria hay un cristal.

La ONU reconoce la Cristalografía como la ciencia que ha permitido la comprensión material de nuestro mundo, de la estructura y las propiedades de los materiales que lo forman.

Podemos encontrar diferentes tipos de cristales en lugares tan insospechados como nuestro oído, las medicinas, los alimentos o los ordenadores.

El uso del cristal nos puede ofrecer distintos beneficios:

Es puro e impermeable

Fácil de limpiar y esterilizar

Transparente para la visibilidad de la luz

Es un material muy versátil

Está hecho de ingredientes puros y naturales de la tierra.

Es inodoro e insípido y conserva al 100% el sabor de las comidas y bebidas

Tipos de cristal

A pesar de ser un material tan común, hay mucha gente que no conoce los diferentes tipos de cristal que existen. Conocer esto puede ayudar a saber elegir qué tipo es mejor para cada cosa y según las necesidades que se quiera cubrir.

Cristales sólidos

Los cristales sólidos tienen una estructura ordenada y repetitiva en su disposición atómica, lo que les otorga propiedades físicas y químicas específicas.

Este tipo de cristales pueden encontrarse en la naturaleza, como el cuarzo o la sal de mesa, o ser producidos artificialmente, como los cristales de silicio utilizados en la fabricación de semiconductores.

Cristales luminosos

Los cristales luminosos o líquidos, se suelen emplear para crear pantallas de aparatos eléctricos. Están formados mediante láminas de vidrio metalizado alrededor de una fina película de sustancia mesomorfa.

Gracias a la tensión eléctrica, la película se torna opaca y, cuando desaparece esa tensión, el cristal líquido vuelve a ser transparente.

Cristales iónicos

El cristal iónico es duro y quebradizo y se mantiene unido gracias a la fuerza electrostática.

Los iónicos tienen dos características importantes: la primera es que están formados por enlaces cargados y la segunda es que los aniones y cationes son de distinto tamaño, normalmente.

Por otro lado, suelen tener puntos de fusión altos y dependiendo de su energía reticular, será más o menos estable. A más energía, más estabilidad.

Cristales metálicos

Los cristales metálicos tienen una estructura simple en la que cada punto reticular está ocupado por un átomo del mismo metal.

Este tipo, normalmente, presenta una estructura en forma de cubo, ya sea en su cuerpo o en sus caras. Los cristales metálicos son densos y sus propiedades varían en función al tipo de metal.

De normal, son buenos conductores de calor y electricidad.

Cristales covalentes

Los cristales covalentes son aquellos en los que sus átomos se mantienen unidos en una red 3D mediante enlaces covalentes.

Un ejemplo que te sonará de este tipo de cristal son los diamantes.

Cristales moleculares

Las moléculas de este tipo de cristal se mantienen unidas mediante enlaces de hidrógeno y fuerzas de Van der Waals.

Suelen ser muy quebradizos y se pueden fundir a temperaturas inferiores a cien grados. Un ejemplo podría ser el dióxido de azufre sólido

Ejemplos de productos hechos con cristal

Como ya sabemos, el cristal es un material versátil y elegante que se adapta a una gran variedad de productos.

Entre los más destacados se encuentran las tazas y vasos de cristal personalizados, que resultan ideales para disfrutar de bebidas frías o calientes en cualquier momento del día. Además, el cristal es un material resistente y duradero, lo que garantiza que estos productos tengan una larga vida útil y puedan ser utilizados una y otra vez.

Las botellas de agua de cristal reutilizables son otro ejemplo de producto que combina funcionalidad y estilo. Estas botellas permiten transportar agua de forma cómoda y segura, mientras se contribuye al cuidado del medio ambiente al reducir el consumo de botellas de plástico desechables.

Además, al personalizarlas con el logo de la empresa, se convierten en un elemento de merchandising efectivo para eventos, ferias o incluso como regalo para clientes y empleados.

Por último, si tienes un restaurante, bar o cualquier empresa relacionada con la hostelería y la restauración, los botes de cocina son otro artículo ideal que puede ser personalizado con tu logo para dar un toque original a la empresa. Estos botes de cocina permiten almacenar todo tipo de alimentos de forma segura y organizada, y su diseño elegante y sofisticado puede complementar la decoración de cualquier espacio.

En definitiva, los productos de cristal personalizados son una opción ideal para empresas que quieren ofrecer regalos originales y de calidad. Su durabilidad, resistencia y estética hacen de ellos una elección inteligente y su personalización permite maximizar su impacto promocional.

Mejores técnicas para personalizar en cristal

Las técnicas de marcaje que más resistencia tienen, teniendo en cuenta que no hay diferencias abismales entre el vidrio y el cristal, son: la serigrafía, tampografía y grabado a láser.

Serigrafía

Técnica que hace posible la decoración de las botellas y demás artículos de vidrio o cristal. Para darle un toque exclusivo a los productos de cristal, la serigrafía es una buena opción.

Sin embargo, no es una de las técnicas más recomendables para productos que se utilizan de forma regular, ya que con el paso del tiempo y el aumento del uso, el diseño se podría terminar borrando

Serigrafía circular

Por otro lado, si buscas lograr un acabado más completo en objetos cilíndricos, esta es la mejor técnica para ello, ya que permite la personalización envolvente y aprovecha mucho más el espacio del producto.

Aún así, la serigrafía circular tampoco es la mejor opción para personalizar productos de cristal que se utilicen regularmente, ya que el diseño se desgasta con más facilidad y se terminaría borrando también..

Tampografía

Gracias a esta técnica, es posible imprimir en zonas de marcaje pequeñas y/o irregulares, así como platos o vasos con mucha facilidad, rapidez y precisión.

En cambio, ocurre lo mismo que con la serigrafía, que si se emplea esta técnica para productos que van a ser utilizados asiduamente, lo más probable es que se acabe borrando el diseño.

Grabado láser

Es la mejor de las cuatro técnicas anteriores en cuanto a durabilidad, ya que se graba directamente sobre el producto y no aplicando una capa de tinta sobre la superficie.

A diferencia de las anteriores técnicas, con el láser es más complicado que el diseño se borre y los resultados son impecables.

Diferencias entre el cristal y el vidrio

Como sabemos, hay dos términos que, habitualmente, se utilizan como sinónimos cuando realmente no lo son. El vidrio y el cristal no son exactamente lo mismo, pero tampoco son dos materiales muy diferentes. Ambos mantienen una composición bastante similar y, aunque sus definiciones a menudo sean muy parecidas, los investigadores del vidrio y el cristal nos dicen lo contrario.

Cristal

Es un sólido perfecto, debido al tratamiento del material y al tiempo de enfriamiento.

El cristal se origina de manera natural, por lo que también participa en la generación de ciertos minerales.

En caso de rotura, el cristal se despedazaría en trozos con aristas muy definidas y cortantes.

VS

Vidrio

Este material, sin embargo, presenta una estructura irregular.

El vidrio necesita de la intervención humana para su creación.

El vidrio tratado térmicamente, como es el vidrio templado, es más seguro y se fragmentaría en pequeños trozos no cortantes en caso de rotura.

En resumen, el vidrio y el cristal son materiales muy parecidos pero no exactamente iguales. No pasa nada si se confunden en el día a día. No obstante, si vamos a hablar de ellos de manera más técnica y profesional, cabe reconocer sus diferencias como dos materiales distintos que son.

¿Por qué reciclar el aluminio?

Reciclar el aluminio es un proceso necesario para ahorrar recursos. Es un proceso sencillo, simplemente hay que fundir y volver a dar forma al material de aluminio. Algo que requiere mucha menos energía que hacerlo desde cero. Concretamente emplea solo un 5% de la energía que requiere la producción de un metal virgen. Este proceso comenzó a hacerse en el siglo XX, una práctica que aumentó durante la Segunda Guerra Mundial.

Pero no será hasta los años 60 cuando su reciclado se comenzó a popularizar hasta que llegó a normalizarse, lo que fomentó el reciclaje de las latas. Durante su reciclado el aluminio no pierde propiedades, eso hace que se pueda emplear tantas veces como se quiera.

Conclusiones

Como hemos visto a lo largo del artículo, el cristal es un material que se utiliza mucho en el día a día, ya que hay una gran cantidad de productos fabricados con cristal que ofrecen, sobre todo, resistencia y calidad.

Hay muchos artículos promocionales de cristal disponibles en nuestra web para regalar en eventos y ferias profesionales o en alguna ocasión especial. No te quedes sin tus vasos personalizados, molan mucho y son muy útiles. ¡Anímate!